Quien tenga niños y perros, debe de tener un cuidado especial a esta oruga, la cual cubre su piel con unas pequeñas cerdas venenosas, que no dudan en lanzar en el momentos en que se sienten en peligro, del mismo modo si se viera removida levemente la tierra cerca de un pino, precaución porque es muy probable que sea un nido de ellas.

